Carlos Rivero Blanco Conceptualmente las cámaras trampa existieron desde que alguien, sin ser visto o notado pudo accionar el obturador de una cámara de fotografía o cine y captar las imágenes de personas o animales sin que el comportamiento del sujeto fuese perturbado por la presencia del fotógrafo oculto. Más adelante, la automatización lograda mediante subterfugios electrónicos permitieron que el mismo animal se hiciese una foto "selfie" al pasar por el sitio previsto e interrumpiendo los haces de luz triangulados que activan las celdas fotoeléctricas del circuito disparador del obturador y un Flash de milisegundos de duración. Tal vez la manera inicial más popular entre los fotógrafos de aves fue la de construir un escondite cubierto con telas estampadas de camuflajes que imitaban los colores y formas del ambiente selvático. O algunos permanentemente fijos en el sitio como el burladero de madera en el Parque de Aves del Puerto de Tokyo de la primera fotografía, d